Nos hemos ido a la zona de Estella y saliendo del pueblo de Etayo hemos cogido camino hacia Learza por una pista de cemento. Lo primero que nos llamado la atención, han sido sus piedras y arenas, tán rojizas:
Hemos abandonado el camino a Learza y girado hacia la izquierda para llegar a un curioso lugar, con palomeras y chabisques habilitados para la caza:
Hemos continuado, de nuevo por pista hasta llegar a una pequeña cueva, con unas curiosas marcas, de las que he sacado alguna foto:
Para terminar, hemos vuelto por el Señorío de Learza y por el camino de quejigos centenarios:
Las tierras rojas y los quejigos son de una belleza espectacular:
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