Hoy también, huyendo de la lluvia, nos hemos acercado a Cáseda para subir al monte San Pedro.
Buena elección, ya que hemos pasado la mañana sin mojarnos y la vuelta circular que hemos hecho nos ha permitido recorrer lugares desconocidos para nosotros.
Al comienzo de la ruta nos hemos encontrado con varios chabisques, con perros, que nos iban saludando con sus ladridos.
La subida ha resultado un tanto aburrida, pues el recorrido por pistas, ha sido demasiado largo. En cuanto hemos cogido un camino y salido de la pista, el paisaje se ha dejado ver y la marcha ha sido más divertida.
Desde la cima se puede ver media Navarra, siendo muy reconocibles las torres de Gallipienzo y Ujué:
La vuelta ha sido un recorrido precioso, con vistas hacia todos los pueblos de la Zona Media y el rio Aragón, muy caudaloso en esta época del año.
Hemos pasado por varias construcciones muy atípicas, como el Cucurucho de Ibarra:
Y bordas con arcos muy caracteristicas de la zona.
Para finalizar el recorrido hemos llegado a la Ermita del Calvario, desde donde se divisa Cáseda a través de los olivos, o los almendros, ya en flor:
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